LOS ESTADOS MIEMBROS DE LA ONU COMIENZAN A FIRMAR EL NUEVO TRATADO PARA PROHIBIR LAS ARMAS NUCLEARES
El miércoles pasado dentro de la Asamblea General de la ONU, diversos países empezaron a firmar un nuevo tratado para la prohibición de las armas nucleares, un texto aprobado el pasado julio por más de 120 Estados. El documento se abrió a la firma de las partes en la sede de Naciones Unidas, aprovechando la presencia de numerosos líderes internacionales con motivo de la Asamblea General. Al menos 42 países sellaron el mismo el tratado, aunque se espera que más puedan hacerlo. Latinoamérica tuvo un gran protagonismo en la negociación del texto y varios países del continente lo firmaron en esta primera jornada, entre ellos Brasil, Chile, Costa Rica, Cuba, El Salvador, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela.
El documento entrará en vigor cuando cincuenta países hayan completado sus procesos nacionales de ratificación. El secretario general de la ONU, António Guterres, fue el encargado de abrir el texto a la firma, calificándolo de «histórico» y recordando que es el primer tratado multilateral de desarme aprobado en más de dos décadas. «El tratado es un importante paso hacia el objetivo global de un mundo libre de armas nucleares», destacó Guterres, que subrayó en todo caso que lograr esa meta requerirá «diálogo» y acciones «prácticas».
Según el tratado, los Estados partes se comprometen, entre otras cosas, a no desarrollar, adquirir, almacenar, usar o amenazar con usar armas nucleares u otros dispositivos explosivos nucleares. El documento incluye además procedimientos para que los países con armas nucleares que quieran sumarse declaren y destruyan sus arsenales. Las Naciones Unidas, desde su concepción, ha procurado eliminar este tipo de armamento. La primera resolución aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1946 estableció una Comisión para tratar los problemas relacionados con el descubrimiento de la energía atómica, entre otros. La resolución estableció asimismo que la Comisión debía presentar propuestas para “eliminar, de los armamentos nacionales, las armas atómicas así como todas las demás armas principales capaces de causar destrucción colectiva de importancia”[1]. Desde entonces, se ha establecido una serie de tratados multilaterales con el propósito de prevenir la proliferación y los ensayos nucleares, y promover a la vez los avances en materia de desarme nuclear. Entre ellos, cabe mencionar el Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares (TNP), el Tratado por el que se Prohíben los Ensayos con Armas Nucleares en la Atmósfera, el Espacio Exterior, Debajo del Agua, también denominado Tratado de Prohibición Parcial de los Ensayos Nucleares (TPPE), y el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (TPCE), que fue firmado en 1996 pero aún no ha entrado en vigor[2].
A diferencia de los anteriores acuerdos, con este último tratado sobre la prohibición de armas nucleares todas las potencias nucleares se han mantenido al margen del proceso, incluidos los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y el Reino Unido). Tampoco han participado los otros cuatro países que disponen de bombas atómicas (Corea del Norte, Pakistán, la India e Israel) ni, con la excepción de Holanda, los miembros de la OTAN, que en varios casos tienen armas nucleares estadounidenses estacionadas en su territorio. Washington, Londres y París consideran que el tratado está desconectado de la realidad de la seguridad global, y afirman que la crisis con Corea del Norte es prueba de que la disuasión nuclear aún es necesaria.
En lo que respecta al Perú, se ha suscrito este instrumento internacional que constituye un paso fundamental hacia el desarme, permitiendo establecer una norma de derecho internacional de prohibición categórica de las armas nucleares en toda circunstancia, así como disponer de un marco legalmente vinculante para la destrucción y su total eliminación de forma transparente, irreversible y verificable. En esencia, el instrumento recoge la prohibición al desarrollo, producción, fabricación, transferencia, posesión y almacenamiento de las armas nucleares, además de la prohibición explícita del uso y amenaza del uso de las mismas.
En una nota de prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores se señaló que “El tratado es el resultado de un proceso de negociaciones en el que participaron y contribuyeron todos los Estados, organizaciones internacionales y representantes de la sociedad civil, reflejando su aprobación el grado de compromiso alcanzado por las delegaciones. El Perú apoya la eliminación de las armas nucleares de manera consensuada y programática”, también reiteró que es uso de armas nucleares da lamentables consecuencias humanitarias derivadas del uso de las mismas y que el Perú, aboga por el establecimiento de zonas libres de las mismas, lo que representaría un paso trascendental hacia un proceso de paz en regiones actualmente conflictivas.
[1] ASAMBLEA GENERAL DE LAS NACIONES UNIDAS. Resolución AG/RES/1, aprobada el 24 de enero de 1946. URL: http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/1%28I%29. Visitado el 23 de setiembre de 2017.
[2] OFICINA DE ASUNTOS DE DESARME DE LAS NACIONES UNIDAS. “Armas Nucleares”. URL: http://www.un.org/es/disarmament/wmd/nuclear/. Visitado el 23 de setiembre de 2017.