CHARLOTTESVILLE: VIOLENCIA RACIAL EN EE.UU.
En el mundo, hasta hace unas pocas semanas, poco sabían quien era Robert Edward Lee, un hombre que sirvió al ejercito desde 1829 hasta 1865 y llego a ostentar el cargo de general del Ejercito de los Estados Sureños Confederados quienes se opusieron a la abolición de la esclavitud. Su fantasma vuelve a dividir al país estadounidense.
El ayuntamiento de Charlottesville, Virginia, había dispuesto el retiro de la estatua del general Robert Lee, por lo cual, el 12 de agosto, un grupo de personas denominadas “supremacistas blancos” protestaron con la finalidad de impedir el traslado y también se hallaban personas que defendieron la disposición del ayuntamiento, contramanifestantes. La confluencia de manifestantes fue de la mano de provocaciones, por parte de ambos grupos, seguido de empujones y desembocó en riñas. El suceso se tiñió de sangre, cuando a las 13:45 horas, un automóvil se estrelló contra otro que estaba cerca de un grupo de contramanifestantes, provoco la muerte de Heather D. Heyer de 32 años, defensora de derecho humanos.
Maggie Astor y Christina Caron para The New York Times, en su versión virtual del 14 de agosto del presente, informan que también fallecieron dos policías Jay Cullen y Berke M.M. Bates quienes estaban monitoreando las protestas desde un helicóptero pero este se estrelló e incendió al momento del impacto
Es de información pública que un total de 34 personas resultaron heridas tras los enfrentamientos de Charlottesville, que fue motivo suficiente para Terry Mc Auliffe, gobernador de Virginia, para declarar estado de emergencia la localidad.
Se tiene que el Estado ya inició investigación policial, de lo cual hasta el momento se tiene que: se ha logrado identificar la identidad del conductor del vehículo como James Alex Fields JR., de 20 años, a quien se le imputa varios cargos, entre ellos: homicidio en segundo grado. Este lunes, el juez encargado del caso, le negó la fianza al mencionado.
Tras los sucesos de Charlottesville, el Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación Racial, en su comunicado del 23 de agosto, califico los sucesos del 12 de agosto como “crímenes racistas” y exhortó al gobierno de los Estados Unidos y sus autoridades a rechazar aquellos discursos de odio racial. Asimismo, en la misma declaración, expresar su preocupación y alarma respecto a los “supremacistas blancos” pues en la manifestación realizaron consignas xenófobas y elogios a grupos neonazis y el Ku Klux Klan.